En un post anterior ya os contamos las ventajas y desventajas del streaming, además de definir qué es el streaming. Hoy, toca comentar cómo funciona el streaming y como podéis utilizarlo para vuestra empresa o negocio.
¿Cómo funciona el streaming?
Las transmisiones de vídeo, una maravilla tecnológica que disfrutamos a diario, tienen un funcionamiento intrigante que pocos conocen a fondo. Cuando te sumerges en el mundo del streaming, te encuentras con un proceso fascinante que va más allá de simplemente hacer clic para reproducir. ¿Te has preguntado alguna vez cómo funciona realmente? Aquí te lo explicamos en detalle.
envío de señal
La empresa que realiza el streaming utiliza un software de emisión (VMix, OBS...) para enviar la información necesaria al servidor correspondiente (por ejemplo, a YouTube). Para facilitar esta tarea, las principales plataformas de visionado (YouTube, Vimeo...) ponen a tu disposición una URL y clave de emisión a través de las cuales te comunicas con sus servidores. Es importante configurar tu software en la tasa de envío de datos, resolución, fps o tasa de audio que mejor se ajuste a las necesidades de tu emisión y del programa..
Qué hace el reproductor de vídeo para tu usuario
Cuando accedes a una plataforma que está emitiendo un contenido en streaming, tu experiencia de usuario es prácticamente igual a si estuvieras viendo un contenido alojado en sus servidores. En todo caso, puedes notar una cierta latencia (delay) en la señal, por el tiempo de procesamiento, aunque estos tiempos son cada vez menores, por lo que los usuarios presenciales y los de streaming gozan del mismo resultado.
Qué es mejor: ¿TCP o UDP?
Hay que aclarar que ambos son protocolos para el envío de información. TCP destaca por lo fiable que es, mientras que UDP brilla más en temas de velocidad. En el streaming, plataformas como puede ser YouTube optan por TCP, asegurando una transmisión estable. Por otro lado, UDP es más utilizado para videoconferencias, donde la velocidad es clave y no te importa perder un pequeño frame.
Streaming y Dispositivos Compatibles
Los usuarios pueden disfrutar del streaming desde una variedad de dispositivos, incluyendo ordenadores, móviles, tablets y televisiones. Dispositivos como Chromecast o Apple TV también están bastante a la orden del día. De la misma forma, se puede hacer una emisión en directo desde dispositivos variados; desde el ordenador o el móvil, por supuesto, pero también desde las propias cámaras modernas, que ya contienen esa función, o desde mezcladores de vídeo profesionales que pueden conectarse directamente a la red.
Algo que hay que tener en cuenta para disfrutar del mejor rendimiento es la velocidad. Mientras que una calidad más baja requiere menos datos, resoluciones como 1080p demandan velocidades de datos más rápidas para una reproducción sin interrupciones.
Cómo puede ayudar el streaming en tu negocio
Ahora que ya sabemos cómo funciona el streaming, toca ver cómo puede ayudar a que tu negocio crezca.
Construye confianza con tu cliente potencial
El streaming puede ser una poderosa herramienta para que tus clientes empiecen a confiar más en ti y tu negocio. Quizá se encuentren en otra región y no puedan acudir presencialmente a tus eventos, pero gracias al streaming, serán tu público. Como siempre, lo que más cuesta es empezar, pero una vez que empieces a interactuar con ellos, les muestras que eres alguien digno de confianza, alguien en quien confiar para que resuelva tus problemas o que les forme en un campo del conocimiento.
Además, es una forma de mantener su atención durante un tiempo algo prolongado y, aunque no sea una interacción realmente personal de tu a tú, les permite ver un poquito más de ti y como eres. Muchas veces, gracias al streaming, ¡el cliente da ese salto y compra!
¿Te interesa una productora de streaming en Zaragoza?
El famoso Top of Mind
¿Quieres que tu cliente te tenga en la cabeza cuando piense en tu producto o servicio? El streaming es una buena forma. Por así decirlo, es una forma de conectar con ellos, y para ellos de conectar con tu empresa.
Una forma para que tu público participe contigo
Es algo con lo que muchas empresas se pelean a día de hoy. Podrías crear cientos y cientos de posts en tu Instagram y aún así no conseguir ni un comentario, pareciendo que hablas con la nada. Un buen vídeo en directo es una forma de que tus clientes se mantengan interesados, o con una sensación de emoción, en saber cómo va evolucionando tu compañía.
Cada día que pasa, algo que incluso el mismo Instagram ha dicho, es que los usuarios tienden a interactuar más con vídeos o reels. Esto te viene genial cuando haces streaming, ya que incluso puedes resubir algún corto con alguna edición como contenido extra.
Básicamente, te ayuda a reciclar un contenido de calidad. Un contenido útil que puede interesas que aparezca en su feed.
Selecciona bien a tu audiencia.
Cuando ya tienes claro cómo funciona el streaming y como empezar, de las pocas cosas de relevancia que te quedan es saber a quién dirigirte, y esto te ayuda a depurar más esa audiencia y que quede solo los que realmente te interesan.
Piensa que ese streaming se basa en tu horario, no en el de los demás, automáticamente defines específicamente quien te ve o puede ver. Además, una vez que ya tienes esto hecho, puedes hablar con la seguridad de que ya has ganado la batalla más dura: llamar su atención.
EL STREAMING IMPLICA LA GRABACIÓN
Muchas veces nuestros clientes nos preguntan cuánto cuesta grabar un acto que vamos a hacer un streaming, o viceversa. La respuesta a veces les sorprende, ¡nada! Siempre que se graba en streaming, el evento queda recogido en la plataforma y además se pueden hacer copias de seguridad offline, grabación de cada cámara... En definitiva, trabajar en streaming es una forma de adelantar el trabajo, ya que no requiere una edición posterior, ¡has hecho el trabajo en directo y en tiempo real!
¿Te interesa el streaming para tu negocio o evento? ¡Contáctanos!